Una vez siendo eficientes y productivos en nuestros procesos, (Parte 1) pasamos al segundo elemento básico de la ventaja competitiva. Ésta es la calidad, la cual identificamos como el conjunto de propiedades pertenecientes a algo, las cuales nos permitirán juzgar su valor.

Lo que incluye la calidad es su forma, características, desempeño, durabilidad, confiabilidad, estilo y diseño. El tener una calidad superior, nos indica que el producto tiene una mayor utilidad que los que venden sus rivales. Para evaluar la calidad de un producto, se comparan con dos tipos de atributos: calidad como excelencia y calidad como confiabilidad.

Quality

La calidad como excelencia se refiere al diseño y estilo del producto, su atractivo estético, sus características y funciones, al nivel de servicio asociado a la entrega del artículo y otros. No es lo mismo comprar una bolsa imitación de piel de una marca que sólo se distribuye en tiendas como Wal Mart, a una de marca como Gucci. Aunque cumplen la misma función, el diseño es muy diferente y notorio. El de la marca Gucci puede estar más grande, más chica, con colores llamativos y con más accesorios. Aunque el de imitación tiene una mejor oferta, se tendrá que pagar más para consumir ese producto que se basa en la excelencia.

La calidad como confiabilidad, es cuando el producto desempeña su trabajo de manera contínua para el que fue diseñado, es muy rara la vez que presenta fallas o se descompone. Con respecto a la excelencia, la confiabilidad aumenta la utilidad del producto, y por lo tanto, el precio que la compañía puede cobrar. A este tipo de calidad se les atribuye más a los autos. Por ejemplo a los asiáticos como Toyota o Suzuki, que han tenido un importante crecimiento y reputación por su calidad en funcionamiento, pero sus precios por lo menos en modelos nuevos, son altos.

La calidad siempre será tan relevante para los servicios como para los productos. Para la ventaja competitiva el tener un producto de alta calidad, tendrá un efecto doble. El primero es debido a que no sólo ofrece un aumento en la utilidad, sino que también la compañía podrá cobrar un precio alto por ellos. El segundo efecto proviene de la mayor eficiencia y costos unitarios más bajos relacionados con productos confiables. Es decir, al ser confiable un producto, el empleado desperdicia mucho menos tiempo fabricando un producto defectuoso y en corregir errores.

Si buscan la supervivencia para su industria, la Calidad los ayudará a diferenciarse de sus rivales y la confiabilidad a disminuir sus costos.

@Leonoration

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