Este artículo es para ti que te emociona que mañana sea VIERNES, especialmente si la semana ha estado cargada de trabajo y si no trabajas los sábados. Pero aunque existieran muchos planes, a veces los viernes parecen ser un desperdicio. Tu cerebro, en anticipación del fin, puede terminar diciendo: “¡Suficiente! Descansemos de esto”. Entonces la tarde solamente se desperdicia.
Y no es de mucha ayuda que tus colegas también sufran de este efecto. Todos ya están pensando en el fin de semana y listos para irse a sus casas; esto genera un decremento en la productividad. Pero en vez de ceder al impulso de soñar despierto con el fin, puedes usar esta oportunidad para hacer que la semana siguiente empiece mejor.
Kevin Daum, emprendedor y autor del best seller “Video Marketing for Dummies”, comparte 7 maneras en que puedes aprovechar los viernes:
1.- Establece contactos. Crea expectativas para la siguiente semana. Si tienes un negocio, puedes pasar la tarde mandando correos o llamando a nuevos prospectos. Agenda una reunión importante que te haga anticipar cosas buenas. Puede que la gente se tarde en contestar ya que es viernes, pero en el mejor de los casos regresarás el lunes con respuestas.
2.- Organiza la semana. Analiza el calendario de la próxima semana y planéala. Establece alarmas o recordatorios, ya sea en tu computadora o smartphone. Incluye las reuniones, fechas de entrega y tareas. Puedes apoyarte de herramientas como The Emergent Task Planner. Esto te ayudará a despejar tu mente de la sensación de que se te ha olvidado algo y reamente tener un fin de semana de descanso, regresarás con más energía el lunes gracias a esto.
3.- Termina algún pendiente. Los viernes son el día cuando muchos están tentados en ver ciertos proyectos o tareas y dicen: “Lo haré el lunes”. Así que escoge uno de tus proyectos que estén en marcha y comprométete a terminar o avanzar antes de que te vayas. La satisfacción de cumplimiento puede motivarte a hacer más. Y el siguiente lunes, tendrás el alivio de saber que esa tarea o pendiente ya no está en tu escritorio.
4.- Sacude tu rutina. Reflexiona por unos momentos en tu rutina semanal. Haz una lista de las distracciones más comunes, y los hábitos que te impiden de empezar tu semana con el pie derecho. Esto puede ser cualquier cosa desde chatear sobre el fin de semana con tus colegas o leer los correos basuras en tu bandeja de entrada. Haz la lista, y escribe que harás en vez de cada actividad. Crea una nueva rutina. Ponla en un lugar visible para que la notes cuando regreses el lunes.
5.- Trabaja en tu futuro. Si simplemente ya no puedes seguir trabajando, pon algo de música y pasa un tiempo escribiendo sobre los pensamientos que tienes sobre tu carrera y vida. ¿Estás trabajando para un mejor futuro? ¿Sabes dónde quieres estar en cinco años? Haz algunas anotaciones y luego llévalas contigo en el fin. Cuando regreses el lunes, tendrás un poco de más claridad y te ayudará a ver más allá en tu semana.
6.- Sorpréndete. Esconde una pequeña sorpresa en tu escritorio. Puede ser un chocolate o un regalo para la semana siguiente. Ponla el viernes por la tarde y tendrás algo que te espere el lunes. La mejor parte es cuando te olvidas que dejaste ese pequeño regalo y luego lo encuentras. Eso te alegra el día.
7.- Termina tu semana agradeciendo. Busca mostrar tu apreciación por alguien. Escoge alguien, un empleado, un colega que te haya ayudado durante la semana, o que haya hecho un trabajo increíble en un proyecto, cualquier cosa. Planea hacer un pequeño gesto por esa persona. Ya sea un mensaje de agradecimiento, algún detalle o una tarjeta. Ejecuta este gesto en tu llegada el lunes.
Todos estos detalles y actividades que puedes hacer el viernes por la tarde puede influencia positivamente en como inicias cada semana. Así que, ¿qué esperas?
Imagen de Ozerina Anna en shutterstock
