Título original: “Funky Business: Talent Makes Capital Dance”
Autor: Kjell Nordstrom & Jonas Ridderstrale
Editorial: Pearson prentice hall
Año: 2000
Precio aproximado: $244
“Las ventajas competitivas pesan hoy en día, lo mismo que los sueños de una mariposa”
Suecia es uno de los mejores mercados para probar un producto, una empresa recibe retroalimentación de forma rápida, por lo que no sorprende que dos suecos escriban un libro que destruye varios mitos y que literalmente deja varios libros mal parados.
Con un lenguaje directo y sin rodeos estos dos economistas suecos te gritan que despiertes, que hay un mundo de oportunidades allá afuera de los que puedes hacer un negocio, pero primero debes entender el territorio de juego y que las reglas han cambiado.
Cuando Kjell y Jonas escribieron este libro, pensaban en los lectores suecos, y que no llegaría a un público muy amplio, y qué grata equivocación. El libro llego a todos los continentes, y se convirtió en un fenómeno entre los libros de negocios, principalmente porque no parecía un libro regular sobre la economía y el mundo empresarial. Y es que la forma en la que escriben Nordstrom y Ridderstrale es simple, sin tantos tecnicismos, con referencias sencillas para crear un contexto, que todos, incluidos los que no están inmersos en el mundo de los negocios pueden entender. Si hay un libro con el que debes adentrarte en este mundo es sin duda Funky Business.
Ya ha pasado más de una década desde que este libro vio la luz, y las ideas que publicaron en aquel entonces hoy son indiscutibles. Todos sabemos que la competencia estimula la creatividad, que toda gran empresa en algún punto tuvo una idea distinta, única, que le permitió despuntar aunque fuese solo un instante, como dicen los autores, toda empresa debe en algún momento poseer un “monopolio ideológico”.
¿Cómo logra una empresa un monopolio temporal? La clave está en los empleados, “el talento mueve el capital”, la clave, concluyen los autores, está en reclutar a los mejores, buscar a los empleados en lugares distintos (puede ser un maratón, o saliendo de una obra de teatro), y no en los mimos lugares de siempre (las escuelas de negocio). Encontrar a personas que tengan la actitud de trabajo, porque es más sencillo capacitar a una persona con buena actitud, que cambiar una mala actitud en un empleado muy capaz. Entre los empleados motivados, y con los estímulos suficientes, eventualmente surgirá una idea brillante, y entre todo el grupo de trabajo se llevará a cabo, lo que generará esa idea diferenciadora que toda empresa necesita para sobrevivir en un mundo muy competido.
¿Cómo diferenciarse? Los autores comentan que es importante entender a las tribus, a los nichos específicos de negocios, que bien pueden ser homosexuales, coleccionistas de estampillas, o fans de los Beatles. Nichos de negocios hay en todas partes, solo es cuestión de estar atentos, de encontrar a qué nicho está llegando tu producto y entonces entender a tus clientes, encontrar qué los emociona, qué los motiva, qué los asusta, qué los mueve, solo entonces podrás enfocar tus acciones hacia ese nicho de mercado que posees. La buena noticia es que hoy en día hay nichos de mercado que no terminan por conformarse pero que posiblemente tu producto provoque esa cohesión, o eres capaz de encontrarlos o incluso capaz de crearlos.
Vivimos una nueva era en los negocios, y una actitud funky no le vendría mal de vez en cuando a varias de las empresas actuales.
Cabe aclarar que este no es un libro de recetas, que te dice paso a paso cómo ser auténtico o funky, este nunca fue el objetivo de los autores, pero te aseguro que después de leer Funky business es muy probable que tu mente te diga que es tiempo de actuar.
Pueden adquirir este libro aquí.
Nos leemos pronto