El día de hoy, en FollowFriday de Think&Start, te presentamos a Michael Arrington, quien es un emprendedor serial, mejor conocido por ser el fundador de TechCrunch; éste último es un blog muy influyente que cubre noticias sobre startups y tecnología. Su perfil de emprendedor es interesante, pero particularmente los últimos meses han sido un tanto ajetreados para el, descubre por qué.
Después de graduarse de la carrera de Economía (1992), y más tarde de la carrera de Leyes (1995), Arrington trabajó para algunas de las compañías de tecnología más destacadas, como idealab, Netscape, Pixar y Apple; además colaboró con muchas startups, fondos de capital emprendedor e instituciones de banca de inversión.
Sin embargo en algún momento se dio cuenta de que nadie estaba hablando lo suficiente sobre compañías para consumidores en Internet, por lo decidió dedicar su tiempo a escribir al respecto y a construir un blog con una audiencia de tamaño relevante, la cual fue creciendo hasta nuestros días. Hoy por hoy, TechCrunch, es una fuente muy importante sobre temas de startups y tecnología, no solo por la gran calidad de sus artículos, sino también por la rapidez con la que se actualiza. Puede decirse que el sitio lleva la crónica de lo que ocurre en torno a los temas que aborda, y es por ello que es seguido con gran atención tanto por emprendedores como por inversionistas.
Durante 2010, Arrington vendió TechCrunch por 30 millones de dólares a AOL, compañía que posee la red de blogs más grande del mundo. ¿Por qué se realizó la venta? Según Arrington, la fuerza de su blog provenía esencialmente de sus escritores, no de sus ingenieros, y la compañía estaba teniendo problemas para mantener contentos a estos últimos, sobre todo por la gran competencia por buenos ingenieros que existe en Silicon Valley. Si TechCrunch se vendía a AOL, ya no tendrían más este problema, pues solo tendrían que preocuparse por generar contenidos.
En 2011, Arrington fue obligado a renunciar porque formó un fondo de capital emprendedor llamado CrunchFund, que administraba los recursos de algunas de las empresas que aparecían mencionadas en TechCrunch. Para algunos directivos en AOL, esto podía ocasionar conflictos de interés, ya que el medio electrónico es tan influyente que, una nota positiva o negativa puede influir en el desempeño de las compañías del fondo en los mercados.
La compañía sigue contando con una excelente reputación, pero por diversos motivos está enfrentando problemas. Entre ellos, cabe mencionar que los escritores más destacados se están yendo, por lo que Arrington mira desde lejos cómo su creación, el trabajo de su vida, pasa por la que sin duda es su época más difícil en los últimos años.
¿Qué pasará con Arrington? El tipo tiene un perfil que genera ruido, comentarios y opiniones, pero básicamente, está informado, muy bien informado; quizá por ello es frecuentemente asediado por emprendedores que lo buscan para platicarle un poco sobre sus modelos de negocios. Y cómo no, si se tienen registros de que cuando trabajaba en TechCrunch, la aparición de un artículo positivo sobre tu negocio en TechCrunch, hacía que el tráfico en tu sitio aumentara exponencialmente, y te en muchos casos te daba credibilidad entre inversionistas potenciales.
Me parece que Michael Arrington es un modelo a seguir para los bloggers, y una excelente fuente de información para todos aquellos apasionados del emprendimiento y la tecnología. Por lo que, sin duda, encontrarás valor en seguirlo en su nuevo blog: Uncrunched, y en su cuenta de twitter: @arrington.
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