Si después de tanto pensar, por fin te decidiste a tener tu propio negocio, ¡Felicidades! Estás empezando a escribir tu historia como emprendedor. Generalmente cuando una persona está pensando en poner un negocio, solamente se pone a pensar en lo fácil o en lo que le dará un buen ingreso. Pero temo decirte que eso no es suficiente, ni lo más recomendable.

Es el error que cometen muchos emprendedores porque el haber escogido un negocio el cual operar, tiene mucho que ver con que se amolde a tus gustos, perfil, horarios y esquemas de trabajo.  Este nuevo proyecto tiene que ser parte de tu vida, te tiene que hacer sentir bien y tener las ganas de dedicarte a él de forma íntegra. Como quien dice, debes enamorarte y sentir pasión por tu negocio. Todo esto es muy característico de un perfil emprendedor. Si no tienes todo esto, es más difícil que fluya la creatividad, dedicación e innovación para tu negocio.

Entonces, ¿qué aspectos debes tomar en cuenta para tener éxito en esta nueva historia que estás escribiendo?

Intereses Personales. Hago hincapié en que se debe adaptar a tus planes de vida, gustos y/o aficiones para dedicarte en cuerpo y alma. Tu visión a futuro y tu relación familiar están muy ligadas a este punto.

Habilidades. Son las que vamos adquiriendo a lo largo de nuestra vida que hacen que se nos faciliten tareas, ya sea por personalidad, entorno o educación. Utilizando tus aptitudes sabrás como ejecutar una idea.

Desarrollo Profesional. No solamente se refiere a la educación y preparación universitaria que hayas tenido, sino también laboral. Incluso hasta por la relación laboral en disciplinas similares a las tuyas.

Experiencia. Si antes de tu propio negocio has trabajado en el mismo ramo, o mismas funciones, te ayudarán a operar y dirigir el tuyo porque ya cuentas con un know how.

Ahora, es importante también saber cuánto tiempo le vas a dedicar a tu nuevo negocio. Si tienes un empleo fijo que aún no piensas dejar, entonces primero empieza dedicándole medio tiempo a tu nuevo negocio. Ahora que si te gusta estar en los dos pero en tu negocio te va bien, el dedicarle medio tiempo es porque realmente nada más estás buscando aumentar los ingresos.

En cambio el dedicarle tiempo completo, requiere de una fuerte inversión o de una gran cantidad de tiempo para desarrollar el negocio. Siendo de esta manera, asígnate de entrada un salario que represente tu mayor fuente de ingresos individuales, de ser posible.

Para esto debes tener en cuenta que existen diferentes formar de ejercer tu autonomía económica. Además de ser independiente, es decir, tú eres el dueño; existen formatos que se clasifican de acuerdo a la relación que tienes tú con el que comercializa tu idea. Puede ser por un modelo de franquicia, multinivel, distribución, licencias, etc; para ser parte de una red de negocios. 

Si vas a escoger uno de estos modelos entonces debes considerar tus finanzas. Prever que los costos y gastos fijos sean costeables para tu inversión inicial y que eres capaz de cumplir con ellos. También considera la posibilidad de diseñar un concepto. Lo ideal es tener la infraestructura o la capacidad  de generar tu propia marca y desarrollar estrategias de mercadotecnia y ventas. Si no tienes esto, lo mejor es reconocer esas carencias y analizar qué podrías aportar a aquellas empresas que sí tienen todo esto.


Entrepreneur, año 19, Edición Especial Septiembre 2011. 
Así que ya sabes, antes de iniciar el proyecto valora si realmente se apega a tu personalidad y que te gusta tanto que le podrás dedicarte el tiempo necesario sin reproches. Disfruta cada paso que des en tu negocio para que se convierta en algo extraordinario para el mercado.

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