Respeto ético.

El respeto es un derecho que se gana cuando se las personas se rigen bajo un comportamiento que redundantemente llamamos respetable, pero realmente a qué se refiere y más aún cuando le añadimos la parte ética.

El respeto de una organización debe partir desde la dirección hasta su último empleado como un ejemplo a seguir de comportamiento y desempeño. Es decir, la dirección debe reflejar aquello que se desea  ver respetado.

Esto desencadenará una influencia positiva en toda la organización; por ejemplo, si el director general llega siempre temprano, esto estimulará que todos los colaboradores sin importar su posición busquen llegar temprano. Dando como resultado, efectos que se concentrarán directamente en los resultados de la empresa, tanto como de desempeño como económicos.

Sin embargo, es importante definir un código de conducta en las empresas, puesto que si como dice el dicho “si no está prohibido, está permitido” permitiendo lugar a la ambigüedad. De aquí se desprende el comportamiento ético que la empresa espera de sus colaboradores y que de igual forma debe ser seguido de la misma estricta manera por sus líderes: Predicar con el ejemplo.

Este código debe enumerar los compromisos de los colaboradores hacia la organización y los de esta misma hacia sus trabajadores y al exterior también: clientes, proveedores y sociedad.

La responsabilidad de la dirección es tan importante al grado es un ejemplo a seguir en la empresa, en sus colaboradores, en sus proveedores, en sus clientes y en la sociedad misma. Es por ello que si un líder proyecta malos hábitos, estos mismos se desarrollarán en sus empleados, generando así ambientes de trabajo denso. En cambio, si se proyecta la armonía, esto generará ambientes de felicidad y gusto por hacer que las cosas sucedan.

La ética marca el camino por el cual la empresa define su cultura organizacional; diversos estudios han comprobado que la ética es un factor competitivo a nivel empresarial y no sólo a nivel de prácticas empresariales, sino también su labor con el medio ambiente y su responsabilidad social. Diversos casos de falta de ética han resultado en ambientes negativos, pérdidas económicas y pérdida de lealtad en los clientes.

Diferentes prácticas de las empresas definen sus comportamiento como ético o poco ético, es importante conocer como distribuye sus riquezas (¿destinan recursos a causas filantrópicas?), ¿permiten situaciones de acoso moral, sexual, discriminación? ¿Son responsables con el medio ambiente? ¿Su publicidad es engañosa? ¿Se les conoce por despidos injustificados? ¿Explotan a sus empleados? ¿Utilizan mano de obra infantil o migrante? Cuestiones de este tipo incitarán a la poca lealtad de muchos colaboradores, clientes e incluso proveedores.

El comportamiento ético de la empresa, no sólo va a un simple listado de maneras de comportarse, sino también con una filosofía en dónde la empresa permita a sus colaboradores el conciliar un equilibrio del trabajo con la vida familiar de los mismos; de igual forma siempre buscará proteger a sus consumidores, no incurrirá en imitaciones o copias, y buscará atraer talento sin incurrir en “robos a otras organizaciones”.

Finalmente es también importante notar que los empleados pueden incurrir también en prácticas no éticas desde críticas constantes a la organización sin nunca proponer mejores; gastar desproporcionadamente recursos de la empresa; robar conocimientos de la organización para su propio beneficio, ocultar conocimientos o incurrir en hacer perder tiempo a la empresa.

Ahora bien, para ser exitosos en el mantenimiento de las prácticas éticas de la empresa, es importante publicar y dar a conocer los códigos de conducta esperados y revisarse periódicamente, así mismo, sancionar a quién no los cumpla.

@ceciliaeinstein

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