El Exitoso Caso de Sergi Reitg

Sergi Reitg es socio fundador de Imira Entertainment, líder española en producción y distribución de series infantiles para el mercado internacional. Esta empresa es una de las pocas que consigue mantenerse a flote ante el doble embate de la crisis económica y la piratería.

Sergi es un tipo extraño: trabaja en el sector audiovisual español, pero duerme tranquilo por las noches. Si no fuera por el tono de respeto que transmite, se diría que se ríe del vendaval que ha asolado a estas empresas.

Pero una cosa es segura: antes de irse a acostar, en lo más profundo, Reitg sabe que ha hecho las cosas bien. Y entonces se dice: «Tranquilo Sergi, Imira Entertainment factura casi todo fuera de España porque creaste una productora que también es distribuidora, y eso te deja fuera de peligro. Has hecho las cosas bien». A veces unos corsarios se cuelan en sueños y le roban sus series infantiles para ganar dinero a su costa, pero la historia no llega a más. «¡Ay!, esas webs piratas», se lamenta; porque esa es su única pena.

Reitg (Barcelona, 1965), también académico de la televisión, fundó Imira Entertainment hace nueve años junto a Myriam Ballesteros, a quien conocía del sector. Tenían clara la necesidad de contar con canales propios de distribución, y dieron en la diana. Gracias a eso hoy se dedican principalmente al mercado internacional. Cuentan con un catálogo de más de 60 títulos de animación y ficción en series y largometrajes para público infantil, y son líderes en lo suyo. En 2012 facturaron 3.5 millones, y ahora están por encima de los 2 millones, debido a la caída del mercado nacional, que prácticamente ha desaparecido del mapa.

Trabajan desde un “entorno favorable”, el Parque Científico de Madrid, donde han buscado colaboraciones para el desarrollo de las aplicaciones móviles de Lucky Fred, Bat Pat y Sandra detective de cuentos.

Pregunta. Son productores y distribuidores. ¿Dónde está el fuerte de Imira Entertainment?

Respuesta. En la combinación de los dos. En producción estamos especializados en series infantiles para televisión. Las fabricamos en España y las distribuimos alrededor del mundo. En distribución llevamos todos nuestros productos y también el catálogo de otras compañías a nivel internacional.

P. Imagino que conocían el sector…

R. Yo salgo en 2003 de una empresa que se llama Cromosoma, donde había vivido la experiencia de una serie llamada Las Tres Mellizas. Al salir fundé Imira Entertainment con Myriam. Fue la primera compañía en España de producto infantil orientado al mercado internacional. En aquel momento cada compañía se distribuía lo suyo, era poco eficiente.

P. Y entonces introducen una serie de innovaciones…

R. Añadimos la distribución y método de producción. Entonces todo era muy endogámico, todo se hacía dentro, y nosotros hicimos la producción cien por cien digital, fuimos los primeros en hacer todo en alta definición y directamente en inglés, cosa que nadie hacía tampoco. La primera serie fue Lola y Virginia, que hicimos junto a France Tv. La primera en formato pequeño fue Vitaminix, se ha vendido en más de 90 países, una serie educativa para enseñar a comer sano.

P. Una curiosidad, ¿Cómo se produce un proyecto de animación?

R. Hacemos los proyectos en función de las necesidades del mercado. Vemos lo que necesita el mercado y desarrollamos proyectos en esa línea, que es un poco nuestro I+D. Cuando tenemos eso hecho, salimos a mover ese proyecto, que es cuando los creativos desaparecen y entro yo más en escena para cerrar acuerdos y conseguir la financiación necesaria para hacer la producción.

P. O sea, que trabajan sobre seguro.

R. Efectivamente. En eso nos ayuda mucho el área de distribución, para estar en permanente contacto con el mercado.

P. ¿Siempre con gente de la casa?

R. Hay un poco de todo. Los creativos principales están dentro de la empresa, diseñadores gráficos y algunos guionistas. Piensa que hay guiones de series que se hacen en EEUU. Ilustradores y diseñadores están en la compañía, y trabajan por proyectos, que pueden durar un año y medio o dos, tranquilamente. A veces enlazan un proyecto con otro y están varios años.

P. ¿Cuántos son en total?

R. Unas doscientas personas durante 18 a 24 meses. Ahora mismo somos 15, porque estamos en inicio de producción. Cuando arranquemos la producción seremos unas 40 o 45. El resto trabajan subcontratadas en doblaje, postproducción, guión, storyboarders…

P. Dice que el sector audiovisual español casi ha desaparecido, pero ustedes distribuyen dos películas premiadas en los últimos Premios Goya.

R. Son películas hechas en España con un presupuesto muy ajustado, y aunque aquí tengan un premio como Goya, en el mercado internacional compiten con otras que tienen un presupuesto cien veces mayor. España a menudo produce productos poco internacionales y con presupuestos muy bajos, y eso se nota en las calidades de producción.

P. ¿No hay muchos que hagan lo mismo que ustedes en España?

R. Seguro que no pasa de las seis. Pero algunas sin capacidad de distribución, por lo que su posicionamiento es un poco más complicado.

P. Siempre me hago esta pregunta: ¿Cuándo habrá películas de estreno en Internet?

R. Los productores y majors de Hollywood no pondrán a la venta sus contenidos aquí hasta que la piratería no sea erradicada. España está en la lista negra de mayor piratería, y estamos en un país Europeo. Es un problema que destruye muchos puestos de trabajo y que impide recaudar impuestos a un país que los necesita.

P. ¿En otros lugares sí se pueden ver?

R. En cualquiera. Si coges una IP que no esté vinculada a España, puedes ver todos los contenidos en poco tiempo a partir del estreno y a precios muy asequibles.

P. Entonces todas las webs piratas son, digamos, su mayor competencia.

R. La peor. Es como si esta noche me llevara este artículo a otro periódico y se lo vendiera, y me quedara yo el dinero de tu trabajo. Una cosa es competir con una empresa del sector, pero hacer un producto y que luego te lo roben, hace que luego no puedas volver a producir, porque no has recaudado suficiente dinero. Esto ha destruido muchísimo el tejido audiovisual.

P. ¿En qué medida?

R. No tengo el dato, pero probablemente es una de las principales, si no la más importante. Podrían existir plataformas legales de contenidos, pero no existen porque hay las plataformas piratas.

P. He leído que trabajan con un fondo de inversión…

R. Estamos cambiando la manera de financiar la producción, pues el modelo vía televisiones casi ha desaparecido. Estamos con un modelo que también incluye financiación privada, a través de un venture capital, con el que hemos cerrado un acuerdo para cuatro series. El reto hoy es construir marcas que puedan ser explotadas en distintos ámbitos, tanto audiovisual como merchandising, con una visión transmedia o 360º. Marcas que puedan circular y monetizarse con juegos, apps, o lo que sea.

Por: Carlos Guerra || La Caja Abierta