El poder que tiene el internet para conectar individuos es cada vez más grande. Mark Zuckerberg y Facebook revolucionaron en el 2004 la forma en que el mundo comparte e interactúa. Años después, una oleada de redes sociales han hecho de muchos individuos personas hiperconectadas, capaces de compartir, acceder y promover una gran cantidad de información en poco tiempo.

Ahora las personas se conectan en torno a ideas, eventos, noticias, etc. con una facilidad asombrosa, pero ¿Qué sucedería si conectáramos a los individuos en torno a los negocios? ¿Qué pasaría si le diéramos a personas normales, como tú y como yo, la posibilidad de crear las empresas, los productos y los proyectos que quieren ver funcionando en la realidad? La respuesta está en el crowdfunding o financiación colectiva, una propuesta alternativa para financiar proyectos y convertir ideas en negocios reales.

La Financiación colectiva o masiva, se refiere al hecho de generar los recursos financieros necesarios para ejecutar proyectos a través de la cooperación colectiva de individuos u organizaciones. De esta forma, un emprendedor interesado en iniciar un pequeño negocio, financiar un trabajo artístico o creativo, u obtener los recursos para lanzar un producto innovador, puede promocionar su idea en internet y recibir pequeñas contribuciones monetarias de un diverso, y generalmente grande, grupo de personas. La ecuación es sencilla: Pequeñas cantidades de dinero aportadas por muchos individuos, al final resultarán en mucho dinero.

Pero, ¿Cómo funciona la financiación masiva?

En internet hay cada vez una cantidad mayor de sitios web dedicados al crowd-funding; sin embargo las características esenciales casi siempre son las mismas:

1. Los usuarios crean un perfil y detallan su idea de proyecto. Definen un periodo de tiempo (regulado por el sitio web) para obtener los recursos y la cantidad de dinero que necesitan.

2. La promoción es clave. Un buen pitch del proyecto y un video son elementos eficaces para difundir tu idea en internet. Tu propia red de contactos se puede convertir en una fuente invaluable para financiar tu idea.

3. ¡Recompensa! Las recompensas son probablemente la gran diferencia entre las donaciones y el crowd-funding. En la financiación masiva tú recompensas a quienes aportan, de esta forma motivas a que un mayor número de individuos te apoye. Puedes, por ejemplo, ofrecer una edición limitada de tu producto a quienes te contribuyan, eso garantiza más aportes para tu idea.

4. Algunos sitios tienen políticas de todo o nada, de esta forma sólo los proyectos financiados en su totalidad obtendrán el dinero recaudado, de otra manera los recursos irán de regreso a quienes aportaron. La idea es evitar que los creadores del proyecto se vean forzados a completar un proyecto con menos fondos de los que originalmente necesitaban.

5. Los sitios web normalmente tomarán el 5% del total de los fondos recaudados, en caso de que se haya alcanzado el objetivo de financiamiento

6. Los creadores del proyecto conservan el total de sus propiedades intelectuales y derechos de autor

El financiamiento masivo está creciendo cada vez más, hace unos años las plataformas de financiamiento colectivo sólo existían en EEUU y Europa, y ahora poco a poco van surgiendo propuestas en América Latina, como la recién lanzada ideame en Argentina o Fondeadora en México, abriendo, con esto, nuevas oportunidades a toda la comunidad de emprendedores en latinoamérica.

Si estás interesado en conocer más, te invitamos a explorar algunos de los sitios de Crowd-funding:

1. www.indiegogo.com (Alcance: Mundial)

2. www.kickstarter.com (Alcance: Sólo USA)

3. www.gofundme.com (Alcance: Europa y EEUU)

4. www.idea.me (Alcance: América Latina)

5. www.fondeadora.mx (Alcance: México)

6. www.catarse.me (Alcance: Brasil)

Imagen de Denphumi en shutterstock

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